El lector de Julio Verne es la última novela de la escritora madrileña Almudena Grandes y es la segunda obra de lo que la autora ha llamado Episodios de una Guerra interminable y que constará de seis novelas independientes.
En este caso lo que propiamente es la Guerra Civil española ya se ha acabado y estamos a finales de los años cuarenta, en un pequeño pueblo de la sierra sur española, en la provincia de Jaén, en Fuensanta de Martos, donde vive nuestro protagonista, Nino, al que llaman el canijo por su altura, que tiene nueve años cuando comienza el libro y vive en la casa cuartel de la Guardia Civil ya que es hijo de un Guardia Civil.
Y vivirá desde el punto de vista de los del pueblo, la situación que se vive en un lugar a las faldas del monte en aquella época, con los maquis todavía arriba, con represalias abajo, con personas que suben al monte cuando las cosas se ponen feas, en definitiva una continuación de la guerra, una resistencia armada en forma de guerrilla que fue habitual en varios sitios después de acabar oficialmente la Guerra Civil en el 39.
Lo novedoso de la novela es el hecho de que sea un niño quien la cuente, lo que descubre, lo que piensa de ello, la relación con sus padres, un amigo mayor que tiene, su ídolo de pequeño, al que quiere parecerse, Pepe el portugués, y sobre todas las cosas el miedo, miedo de niño, miedos de adultos, miedos en un bando y en otro, algo que reinó por aquella zona durante demasiados años.
Bien es cierto que vuelve sobre el tema de la postguerra civil la escritora, aunque también hay que reconocer que vuelve a trazar una historia muy bien contada, siempre desde el punto de la vista de las ideas de la escritora, eso hay que tenerlo en cuenta, pero con personajes creíbles, no todos pero sí muchos, y con historias que si no exactas seguro que algunas muy parecidas pasaron en esas terribles épocas de nuestra historia.
Escrito por : Garfer
