Cómo tratar a un familiar que sufre esquizofrenia


 Cómo tratar a un familiar que sufre esquizofrenia
¿Qué hacer cuando un miembro de la familia comienza a comportarse de forma diferente y “rara”? Cuando ya no responde a los cánones normales de comportamiento, no lleva a cabo sus actividades como antes y empieza a tener dificultades para comunicar o expresar lo que piensan y sienten? ¿Qué hacer cuando nuestro hijo o hermano es diagnosticado con esquizofrenia?

La esquizofrenia se caracteriza como un trastorno psicótico. En este caso, el individuo crea otra realidad en la que vive y que no es compatible o no puede manejar. Este trastorno afecta a alrededor del 1% de la población mundial, se manifiesta entre la adolescencia y la edad adulta y los síntomas principales son: delirios (pensamientos incoherentes con la realidad), alucinaciones (ve, oye o siente cosas que no existen), lenguaje desorganizado (discursos y pensamientos ilógicos e inconexo), afectan a discapacitados (dificultad para sentir y expresar sentimientos) e inadecuado comportamiento (impulsividad, agresión o ira, etc.)
El diagnóstico de la esquizofrenia puede ser bastante largo, pero depende de la exclusión de otros factores, tales como el abuso de sustancias (drogas, alcohol), reacciones a medicamentos, otros trastornos psiquiátricos o psicóticos. Además, cada individuo tiene síntomas de manera única, que puede dificultar la identificación. Mientras tanto, el individuo y todos sus allegados sufren mucho debido a las reacciones y los efectos de síntomas confusos, incomprensible y doloroso enfermedad.
Después del diagnóstico definitivo, se inicia tratamiento farmacológico, que siempre debe ir acompañada por el psiquiatra. El proceso de adaptación y la dosis de los medicamentos también puede ser un poco lento y puede tardar semanas o meses. Además de la medicación, el tratamiento debe contar con un equipo multidisciplinario integrado por un psiquiatra, un psicólogo y, en muchos casos, un terapeuta ocupacional.
Siempre es importante que la familia, especialmente los cuidadores de los pacientes esquizofrénicos, estén constantemente vigilados y guiados por el mismo equipo. Los familiares también necesitan un tratamiento psicológico, ya que todos los comportamientos inapropiados, incluso después del diagnóstico y la medicación puede ser muy difícil de vivir.
Los sentimientos de negación, la culpa, la tristeza, la ansiedad y el miedo son comunes entre los miembros de la familia. A menudo, la falta de orientación conduce a reacciones nocivas que pueden empeorar el paciente, por no entender lo que está sucediendo con el portador de la esquizofrenia.
La esquizofrenia es una enfermedad crónica y por lo tanto no existe una cura. Sin embargo, en consonancia con el acompañamiento de un equipo multidisciplinario puede mejorar los síntomas y de la enfermedad con el fin de proporcionar una calidad de vida para los pacientes y sus familias. Más que eso, la intervención de un psicólogo en el entorno natural del paciente puede ser muy productivo, el desarrollo de las actividades y la mejora de las capacidades individuales que van más allá de la enfermedad, incluyendo la mejora de la relación entre los miembros de la familia.
A un familiar esquizofrénico no se le debe dar bebidas alcohólicas, ya que estos son muy débiles para abandonar vicios, y por tanto se harían muy dependientes de tomar, afectando aun más su cerebro.
Se debe evitar por todos los medios discutir acaloradamente con una persona que sufra esta enfermedad, puesto que son proclives a tener fuertes ataques de ira, en donde no pueden controlar sus emociones y descargan toda su furia en una pelea verbal e incluso física.
Nunca corrobores con los delirios de persecución que en ocasiones presentan ni asegures que son ciertas las voces que oyen. Esto agrava más su situación.
No lo lastimes diciéndoles loco ni anormal, trata de que nunca ofenderlo con su condición mental, pues sufren mucho y saben de su problema en el fondo. 
Es bueno que participe con personas de su misma condición en programas de autoayuda a pacientes con tal enfermedad. Contrario a unirlo con grupos de personas normales. Se de evitar que estudie o participe con personas que no sufren de la enfermedad, puesto que estas quizás no conozcan de su enfermedad y la lastimen, siendo esto aun peor para el esquizofrénico.
Siempre es bueno que la familia busque ayuda en asociaciones de familia y amigos de pacientes con esquizofrenia, ya que también pueden conseguir apoyo e información. Ofrecen conferencias gratuitas, además de videos y relatos personales.
Siempre es muy importante discutir y buscar información acerca de la esquizofrenia, ya que el tema sigue siendo objeto de muchos prejuicios.
Para conocer más a fondo la esquizofrenia, se sugiere ver la película “Una mente maravillosa” y el documental brasileño “Estamira”. Ayuda mucho al familiar entender el problema.
Comparte el contenido
Share on Facebook
Facebook
Tweet about this on Twitter
Twitter
Email this to someone
email

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *