Opinión House

Una serie de éxito que va camino en convertirse en serie de culto es la protagonizada por Hugh Laurie, quien encarna al doctor Gregory House. El Dr. House es brillante en sus diagnósticos, pero carece de empatía y de diplomacia, en parte debido al dolor y la amargura

que arrastra tras casi perder su pierna y quedar con secuelas y dolores de por vida. Drogadicto en muchas temporadas de la serie y siempre irreverente, tras el intento por finalizar la serie con su internamiento en un psiquiátrico los productores se vieron obligados a continuarla.

Al Dr. House le acompañan unos personajes fijos, compañeros de profesión, y un equipo de ayudantes que se vio modificado tras las tres primeras temporadas. La serie puede calificarse como de humor, aunque no está exenta de situaciones muy dramáticas e incluso refleja dilemas morales.
Sin embargo el personaje de Grogory  House suele ser del agrado del público. El motivo, para mí, es muy claro: todas hemos deseado en alguna ocasión decir lo que realmente pensamos a alguien sin importarnos las consecuencias. Y eso es algo que el Dr. House hace constantemente y que, unido a su brillantez profesional, ocasiona una mezcla de rechazo y de admiración que engancha. Como la propia vicodina que consume House en la mayoría de las temporadas de la serie.
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