Sunset Park es la última novela del escritor norteamericano Paul Auster.
La novela puede decirse que está dividida en dos partes, una primera en que nos cuenta la situación del protagonista, Miles Séller, un chico que ronda los treinta pero que lleva siete años sin contacto con su familia, cuando dejó la Universidad, al llegar a colmar el vaso de una tragedia familiar.
Y una segunda parte en la que ya nos trasladamos a Sunset Park, en Nueva York, a una casa okupa donde por distintas circunstancias de la vida conviven cuatro personas, el propio Miles, un amigo suyo de juventud y único contacto con su familia durante los siete años y dos amigas de éste, cada personaje con sus problemas y sus razones para vivir en una casa okupa.
La novela abarca muchos temas, desde la convivencia en los nuevos tipos de familia con padres casados por segunda vez e hijos de matrimonios anteriores, cómo puede afectar a una familia una tragedia en la misma, la falta de dinero, el no plantearte el porvenir más allá de un mes, una relación con una chica que tiene diecisiete años, pero sobre todo la novela habla de madurez, de tenerla para afrontar las cosas, en Miles, en su madre, en su padre, en su madrastra, en cómo se necesita esa madurez para afrontar la vida, y en cómo la falta de ella te lleva a huir de los problemas, a retrasarlos, a esperar y por lo tanto a no poder seguir hacia delante.
Sin duda una de las mejores novelas de Auster que he leído últimamente.
